La toxina botulínica (botox) es uno de los procedimientos más populares no quirurgico utilizados porque suavizan las líneas de expresión y las arrugas. Botox es tradicionalmente utilizado en los músculos relacionados con las líneas de expresión de los ojos y la frente. Su aplicación se ha extendido a reducir la apariencia de las arrugas alrededor de la boca y del cuello.
Botox es el nombre comercial de la toxina botulínica tipo A elaboradas por el laboratorio Allergan.
Su función es la de relajar o disminuir la acción de ciertas regiones musculares.
Existen dos tipos de arrugas:
Luego de la aplicación de la toxina botulínica, se suprime el impulso nervioso en ese grupo muscular, relajando el músculo con la posterior atenuación de las arrugas, La piel se torna más lisa y relajada, dando un aspecto más joven, sin modificación de la expresión.
El botox, procede a la relajación de los músculos donde se inyecta. El botox no es inyectar por inyectar, es el arte de diseñar un rostro joven y natural (sin que se note), y cada persona es UNICA, así que no es algo que se aplique sistemáticamente.
Es aconsejable su aplicación dos veces al año.
La toxina botulínica también se utiliza como auxiliar en migrañas y sudoración excesiva.
Dejará la piel más lisa y la cara más relajada, contribuyendo a dar un aspecto más joven.
Las recomendaciones luego de un tratamiento con botox son:
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